El deterioro de las funciones motoras en personas mayores de 65 años puede indicar una muerte inminente.
La experimentación de los científicos comenzó a finales del siglo XX. Así, de 1985 a 1988, especialistas de Inglaterra y Francia estudiaron la influencia de los factores sociales, conductuales y biológicos en la salud. En el estudio participaron 6.000 personas de entre 35 y 55 años.
Después, de 2007 a 2016, se evaluaron tres veces las funciones motoras de los voluntarios.
Durante el examen, se tuvieron en cuenta factores como la velocidad al caminar, el tiempo que se tarda en levantarse de una silla, la fuerza de agarre y las dificultades en la vida diaria, por ejemplo, problemas para vestirse, preparar comidas y comprar alimentos.
La tercera fase se prolongó hasta octubre de 2019. En ese momento, los científicos registraron el número de muertes entre los voluntarios de la prueba.
Después de analizar todos los factores, los investigadores descubrieron que aquellos que tenían dificultades para caminar tenían un 22% más de riesgo de muerte, los que tenían problemas con la fuerza de agarre - en un 15%, levantarse de una silla - 14%, y en un 30% en los que tenían dificultades en la vida cotidiana, escribe Medicforum con referencia a la revista científica The BMJ.
También los expertos científicos descubrieron que entre los participantes del experimento, que posteriormente murieron, los indicadores del tiempo de levantarse de la silla fueron peores durante 10 años antes de la muerte, su propia evaluación de la función motora - durante 7 años, las dificultades en la vida cotidiana - durante 4 años.
